El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó que mantuvo una conversación telefónica “extremadamente productiva” con el primer ministro de Canadá, Mark Carney. Durante la llamada, ambos líderes coincidieron en diversos temas y acordaron reunirse inmediatamente después de las elecciones federales canadienses, programadas para el 28 de abril, con el objetivo de abordar asuntos políticos y comerciales que beneficien a ambas naciones.
Esta comunicación se produce en un contexto de creciente tensión comercial, luego de que la administración de Trump anunciara la imposición de un arancel del 25% a las importaciones de automóviles, medida que entrará en vigor el 3 de abril y que podría afectar significativamente a la industria automotriz canadiense. Aunque durante la llamada no se detalló si se alcanzó algún acuerdo respecto a estos aranceles, Trump expresó su deseo de mantener una buena relación con Canadá, suavizando el tono en comparación con interacciones previas.
Por su parte, Carney ha manifestado que Canadá tomará represalias si Estados Unidos sigue adelante con la aplicación de los aranceles, enfatizando la necesidad de reducir la dependencia económica de su país respecto a su vecino del sur y explorando nuevas relaciones comerciales. Ambos líderes acordaron entablar negociaciones integrales después de las elecciones canadienses para redefinir la relación económica y de seguridad entre las dos naciones.
