El presidente Trump anunció el despliegue de 2 000 soldados de la Guardia Nacional en Los Ángeles para frenar protestas desatadas por redadas del ICE que detuvieron a más de 40 migrantes, principalmente mexicanos, en días recientes
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Tom Homan, el llamado “zar de la frontera”, respaldó la medida y advirtió que autoridades locales como el gobernador Gavin Newsom y la alcaldesa Karen Bass podrían enfrentarse a arresto si impiden el despliegue, al considerar que proteger a migrantes indocumentados es obstrucción a la ley.
Ante la militarización, Newsom y Bass acusaron al presidente de escalar tensiones innecesariamente. Organizaciones civiles alertaron sobre posibles violaciones a los derechos humanos, mientras el secretario de Defensa contempló movilizar marines si la violencia continúa.