El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha incrementado los aranceles a las importaciones provenientes de China, alcanzando un total del 145%. Este aumento incluye un arancel base del 125%, más un 20% adicional relacionado con el tráfico de fentanilo.
Esta medida excluye a China de una tregua arancelaria de 90 días otorgada a otros socios comerciales, intensificando las tensiones entre ambas naciones. El gobierno chino ha manifestado su firme voluntad de responder a estas acciones, indicando que posee “recursos abundantes” para contrarrestar las restricciones económicas y comerciales impuestas por Estados Unidos.
Analistas advierten que esta escalada en la guerra comercial podría tener repercusiones significativas en la economía global, afectando las cadenas de suministro y elevando los costos para consumidores y empresas a nivel mundial.