El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha alcanzado un acuerdo con fabricantes de automóviles para reducir temporalmente los aranceles del 25% impuestos a vehículos importados. La medida busca aliviar la presión sobre la industria automotriz y fomentar la producción nacional.
Según el acuerdo, las empresas que fabriquen vehículos en Estados Unidos recibirán reembolsos del 15% en el primer año y del 10% en el segundo año. Esta política se aplicará tanto a compañías nacionales como extranjeras con plantas en el país.
El secretario de Comercio, Howard Lutnick, calificó el pacto como una “gran victoria” para la política comercial de la administración. Países como Alemania, Japón, México y Canadá son los más afectados por los aranceles, aunque estos últimos tienen exenciones temporales para las partes automotrices.
