La Suprema Corte de Justicia de la Nación ordenó la liberación inmediata de Juana Hilda González Lomelí, quien llevaba casi 20 años presa por el secuestro y asesinato de Hugo Alberto Wallace. El fallo determinó que su confesión fue obtenida bajo tortura, lo que invalida todas las pruebas derivadas del mismo .
Juana Hilda salió de prisión con una sonrisa; su caso ha sido catalogado como una “fabricación judicial” impulsada por actores como Isabel Miranda de Wallace y diversas autoridades ministeriales . Este fallo podría generar un efecto dominó: al menos cuatro de los otros acusados han presentado amparos similares, argumentando tortura y pruebas mal obtenidas .
Expertos en derechos humanos y organizaciones civiles han señalado que este es un caso emblemático de impunidad y violaciones al debido proceso en el sistema judicial mexicano. La Corte, a través del ministro Gutiérrez Ortiz Mena, emitió una crítica severa a la Procuraduría y a la construcción misma del expediente