La Selección Mexicana, con un equipo alternativo liderado por Javier Aguirre, dio la campanada al vencer 0-2 al Internacional de Porto Alegre en el estadio Beira-Río, Brasil. A pesar de no contar con jugadores europeos ni todos los de la Liga MX, el conjunto mexicano mostró carácter y aprovechó la velocidad en el contragolpe para llevarse la victoria.
El partido comenzó con un Inter agresivo, asfixiando a México en su área durante los primeros minutos. Sin embargo, Aguirre planteó una estrategia efectiva al ceder la posesión y apostar por los contragolpes. Jorge Ruvalcaba, de Pumas, fue clave en este esquema, aunque desperdició dos oportunidades claras al 20’ y 27’.
El marcador se abrió al 34’, cuando Jesús Gallardo desbordó por la izquierda y envió una diagonal precisa. Ruvalcaba dejó pasar el balón con una finta, permitiendo a Erik Lira definir con clase. A pesar de los intentos de Enner Valencia al 39’ y 40’, el Inter no logró igualar. En el tiempo de compensación, Ruvalcaba selló el 0-2 tras ganar en velocidad y definir ante el portero Anthoni al 45+1’.
Con más de 43 mil aficionados en el estadio, el Inter no pudo imponer condiciones, en parte porque se encuentra en pretemporada y el encuentro fue su primer duelo del año. En la segunda mitad, el equipo brasileño no generó peligro, mientras que Aguirre reforzó sus líneas y dio minutos a jóvenes jugadores, consolidando un triunfo que da confianza para el próximo encuentro ante River Plate.
El resultado es un gran paso para México, que demuestra que su talento juvenil está listo para enfrentar desafíos internacionales.