El delantero mexicano Santiago Giménez tuvo un debut memorable con el AC Milan, al ser parte crucial de la victoria 3-1 sobre la Roma en los Cuartos de Final de la Copa Italia. El mexicano ingresó como relevo y ofreció una asistencia para el gol de su compañero Joao Félix, quien también debutaba con los ‘rossoneri’ en esta temporada de invierno.
Giménez comenzó en la banca en su primer partido oficial con el Milan, que se disputó en el Estadio de San Siro, apenas cuatro días después de su fichaje procedente del Feyenoord. Durante este tiempo, el mexicano realizó los exámenes médicos, firmó su contrato y fue presentado oficialmente.
El partido arrancó con dominio del Milan, que se puso rápidamente 2-0 con un doblete de Tammy Abraham, quien anotó en los minutos 16 y 42, el primero de cabeza y el segundo con una definición precisa dentro del área. Sin embargo, la Roma no se dio por vencida y recortó distancias al inicio del segundo tiempo, con un gol de Artem Dovbyk al minuto 54, dejando la eliminatoria abierta.
Ante la presión de los romanos, el técnico del Milan, Sérgio Conceição, decidió dar la oportunidad a Giménez y a Joao Félix, buscando asegurar la clasificación a Semifinales. Fue en el minuto 59 cuando ambos refuerzos entraron al campo. Y a los 12 minutos de su ingreso, Giménez mostró su clase con un pase filtrado a Joao Félix, quien, sin oposición, encaró al portero y definió con un toque suave y bombeado para poner el 3-1 final.
Este debut soñado para Santiago Giménez consolidó su presencia en el Milan y dejó claro su potencial como pieza clave en el ataque del equipo, que avanzó a las Semifinales de la Copa Italia gracias a su rendimiento y el de sus nuevos compañeros.