El Palacio de Buckingham emitió un comunicado informando que el rey Carlos III de Reino Unido ha sido diagnosticado con cáncer, aunque no de próstata como se especulaba inicialmente. El cáncer fue detectado durante el tratamiento para el agrandamiento de próstata.
Se ha iniciado un programa de tratamientos regulares, lo que ha llevado a la suspensión de todas sus actividades públicas programadas. A pesar de esto, el rey continuará supervisando asuntos estatales y trámites oficiales.
Se agradece al equipo médico por su rápida intervención y el rey mantiene una actitud positiva hacia su tratamiento, esperando retomar sus funciones públicas lo antes posible.
Se ha compartido el diagnóstico para evitar especulaciones y fomentar la comprensión pública sobre el cáncer.
El rey recientemente salió del hospital después de recibir tratamiento durante tres noches por un procedimiento correctivo para el agrandamiento de próstata, que incluyó una cirugía. Las autoridades han asegurado que su salud no está en grave peligro y continúa siendo el jefe de Estado en funciones.
