El papa Francisco, nacido Jorge Mario Bergoglio, falleció este 21 de abril de 2025 a los 88 años en su residencia de la Casa Santa Marta, en el Vaticano. Fue el primer pontífice latinoamericano y jesuita en la historia de la Iglesia Católica. Su elección en 2013 marcó un cambio significativo en la dirección del papado, destacándose por su enfoque en la humildad, la justicia social y la cercanía con los más necesitados.
Durante su pontificado, Francisco implementó reformas en la Curia Vaticana, abordó con firmeza los casos de abusos sexuales dentro del clero y promovió el diálogo interreligioso. Su encíclica “Laudato Si’” en 2015 fue un llamado global a la conciencia ecológica y al cuidado del medio ambiente. Además, abogó por una Iglesia más inclusiva, mostrando apertura hacia comunidades marginadas y enfatizando la importancia de la misericordia y el perdón.
En los últimos meses, su salud se había deteriorado debido a una neumonía bilateral, lo que requirió una hospitalización prolongada. A pesar de su estado, realizó su última aparición pública el Domingo de Resurrección, impartiendo la bendición Urbi et Orbi desde el balcón del Vaticano. Su muerte fue anunciada oficialmente por el cardenal Kevin Joseph Farrell, quien destacó la vida del pontífice dedicada al servicio de Dios y de la Iglesia.
El legado del papa Francisco perdurará como el de un líder espiritual que buscó acercar la Iglesia al pueblo, promoviendo valores de humildad, compasión y justicia. Su vida y obra continúan inspirando a millones alrededor del mundo.