Miles de personas se congregaron en la Basílica de Guadalupe para orar por la salud del Papa Francisco, en un acto que combinó luto, fe y esperanza. Aunque el Vaticano no ha emitido un reporte alarmante, los rumores sobre el estado de salud del pontífice movilizaron a creyentes de todo el país.
Con veladoras, flores y cánticos, los asistentes mostraron su apoyo espiritual al líder de la Iglesia católica, a quien consideran un referente de humildad y cercanía con los pueblos de América Latina. El ambiente fue de profunda devoción, con misas especiales y rezos colectivos durante todo el día.
Autoridades eclesiásticas resaltaron la conexión emocional que existe entre los mexicanos y el Papa Francisco, cuya figura ha sido especialmente relevante para comunidades vulnerables. La jornada dejó ver la fuerza simbólica de la fe católica en el país, y la capacidad de convocatoria de la Virgen de Guadalupe en momentos de incertidumbre.