El ayatolá Alí Jameneí calificó el ataque israelí como un “crimen” y prometió un destino “amargo y doloroso” para el régimen sionista, citando el derecho de Irán a defenderse bajo la Carta de la ONU.
Por su parte, el portavoz militar Abolfazl Shekarchi declaró que tanto Israel como Estados Unidos “recibirán una bofetada contundente” si continúan la agresión.
Estas amenazas elevan la tensión en la región, donde se espera que Irán utilice drones, misiles o redes proxy para responder. Aquellos riesgos podrían impactar en mercados energéticos, rutas marítimas y estabilidad global .