La vicepresidenta Kamala Harris y la ex primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, unieron fuerzas este sábado para advertir a los votantes que “hay mucho en juego” en las elecciones del próximo 5 de noviembre, en especial para la salud y los derechos reproductivos de la mujer, si Donald Trump llega nuevamente a la Presidencia.
En un abarrotado mitin en Kalamazoo, en el estado clave de Michigan, la candidata demócrata y la ex primera dama levantaron sus voces para cargar contra el expresidente Donald Trump (2017-2021) y los retrocesos en los derechos que, a su juicio, Estados Unidos ha experimentado.
“Hay mucho en juego en esta elección”, dijo Harris, subrayando que la actual contienda presidencial es “aún más importante” que la de 2016 o 2020.
“En los últimos ocho años, Donald Trump se ha vuelto más confundido, más inestable y más enojado, y está claro que se ha vuelto cada vez más desquiciado”, acusó Harris.
La vicepresidenta también echó mano de una reciente sentencia de la Corte Suprema de Estados Unidos que le otorgó inmunidad parcial al expresidente por el caso del asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021. “Imagínense a Donald Trump sin una barrera que lo detenga”, recalcó.
Harris criticó nuevamente a su oponente por haber dicho que quería generales como los de Adolf Hitler durante su mandato en la Casa Blanca y amenazar con usar al ejército contra aquellos que no están de acuerdo con él.
Obama no se quedó atrás en las críticas al republicano al confesar que está “un poco enojada porque somos indiferentes a su comportamiento errático, su evidente deterioro mental, y su historia como delincuente convicto”, cuando se compara al candidato republicano con Harris.
La exprimera dama también dedicó un buen espacio de su discurso de más de 40 minutos y de antesala a Harris para enumerar los fracasos de la Administración Trump al calificar como pobre la respuesta a la pandemia de Covid-19, cuando desacreditó a los científicos y esparció información falsa.