El actor y director Justin Baldoni presentó este jueves una demanda contra Ryan Reynolds, Blake Lively, y otros involucrados, alegando acoso, difamación y extorsión. El caso, interpuesto en un tribunal federal de Nueva York, surge tras las acusaciones de Lively de haber sufrido acoso sexual durante la grabación de It Ends With Us (Romper el círculo), en la que ambos participaron, y de una supuesta campaña de desprestigio posterior.
La querella también incluye a Leslie Sloane, publicista de Lively, la agencia Vision PR, y colaboradores de Baldoni como Wayfarer Studios, Jamey Heath, y las publicistas Jennifer Abel y Melissa Nathan, esta última señalada como figura clave en los intentos de desprestigiar a Lively. Baldoni solicita un juicio y exige al menos 400 millones de dólares por daños y perjuicios.
Según los abogados de Baldoni, Lively y Reynolds habrían encabezado un supuesto plan para socavar su reputación profesional y “arrebatar” la película de las manos de su director y productora. Afirman que Lively recurrió a amenazas y extorsión para evitar que sus compañeros asistieran al estreno del filme, mientras ella acaparaba la atención mediática.
Por su parte, Lively denunció en diciembre que tanto Baldoni como Wayfarer Studios diseñaron un “plan de varios niveles” para desacreditarla después de que ella denunciara comportamientos de acoso sexual durante el rodaje. Entre las acusaciones, señala el uso de redes sociales y publicaciones en prensa para atacar su reputación.
El pasado 2 de enero, Baldoni también demandó a The New York Times por difamación, alegando que el medio publicó las declaraciones de Lively sin verificar su veracidad, dañando aún más su carrera.
Este caso plantea una controversia significativa en Hollywood, destacando el poder y las disputas entre figuras influyentes de la industria. Las partes involucradas no han emitido declaraciones adicionales al respecto.