El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció el retraso de la liberación de más de 600 presos palestinos, prevista para ese día, hasta que Hamás garantice la liberación de los próximos rehenes israelíes sin “ceremonias degradantes”. Esta decisión se basa en las “repetidas violaciones” del alto el fuego por parte de Hamás, incluyendo actos considerados humillantes durante la entrega de rehenes.
La lista de presos palestinos incluye individuos condenados a cadena perpetua y otros detenidos tras el ataque de milicias palestinas en octubre de 2023. La suspensión de su liberación ha generado tensiones adicionales en el frágil acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás.
Hamás ha criticado la decisión de Israel, calificándola como una “violación flagrante” del acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes. La organización palestina ha difundido videos de rehenes israelíes pidiendo el fin de la guerra, intensificando la tensión entre ambas partes.
La comunidad internacional, representada por la ONU, ha intervenido condenando las ceremonias consideradas degradantes durante la entrega de rehenes. Se espera que las negociaciones continúen para resolver las diferencias y garantizar la liberación segura y digna de los rehenes de ambas partes.
