En Tijuana, Baja California, el Gobierno de México ha abierto el primer albergue temporal destinado a recibir a connacionales deportados desde Estados Unidos. Este espacio, anunciado por la presidenta Claudia Sheinbaum, busca brindar atención integral y digna a los repatriados bajo las políticas migratorias estadounidenses.
Ubicado en una sección de la plaza comercial Flamingos, a unos 15 kilómetros del puerto fronterizo de San Ysidro, el albergue ofrece servicios médicos y psicológicos, así como acceso a programas de empleo y atención médica del IMSS. Mónica Vega, secretaria de Medio Ambiente de Baja California y coordinadora del albergue, destacó que ya está listo para operar y atender a los deportados las 24 horas.
“Ya estamos listos para empezar a recibir a las personas que vayan retornando, estamos a la expectativa porque hasta este día no hemos recibido migrantes, pero contamos con todo el equipo humano necesario para atenderlos las 24 horas del día”, aseguró.
El albergue, resguardado por la Guardia Nacional y el Ejército, fue diseñado estratégicamente por su cercanía al puerto fronterizo El Chaparral, principal punto de deportaciones. Según Vega, el espacio garantiza condiciones dignas, con instalaciones que priorizan la seguridad, privacidad y comodidad de los migrantes.
“Pensamos en este lugar porque aquí se facilitan las medidas de seguridad y porque cuenta con todos los elementos para que los migrantes puedan tener una atención cálida y humana, necesitábamos un espacio también con los servicios de baño y agua caliente funcionales y, además, que fuera digno para ellos y les diera privacidad también”, manifestó.
Este albergue es el primero de los nueve prometidos por Sheinbaum, y su apertura refleja el compromiso del gobierno para enfrentar los retos migratorios actuales. “Durante toda la semana se trabajó a marchas forzadas para lograrlo, considerando que por esta frontera suelen realizarse el mayor número de deportaciones”, concluyó Vega.