La primera elección judicial en México, celebrada el 1 de junio, registró una participación ciudadana de aproximadamente el 13%, muy por debajo del 20% esperado por las autoridades. A pesar de ello, la presidenta Claudia Sheinbaum calificó la jornada como un “éxito” y destacó la importancia del proceso democrático.
El conteo de votos se ha extendido debido a la complejidad del proceso y se espera que los resultados finales se oficialicen hasta el 15 de junio. La secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, afirmó que la elección se llevó a cabo en un ambiente de paz y que representa un paso hacia una justicia más transparente y cercana al pueblo.
La baja participación ha generado críticas y cuestionamientos sobre la legitimidad del proceso, especialmente por parte de la oposición, que llamó a boicotear la elección. Analistas advierten sobre los riesgos de una politización del sistema judicial y la necesidad de fortalecer la confianza ciudadana en las instituciones