El Tribunal Constitucional de Corea del Sur ha destituido definitivamente al presidente Yoon Suk-yeol, tras determinar que violó la Constitución al declarar la ley marcial el pasado 3 de diciembre y al enviar al Ejército al Parlamento para impedir que los legisladores anularan dicho decreto.
Yoon había sido suspendido de sus funciones desde hace más de 100 días, después de que la Asamblea Nacional aprobara una moción para su destitución debido a estas acciones. La decisión del tribunal, adoptada por unanimidad, tiene efecto inmediato y es irrevocable, lo que obliga al país a celebrar elecciones presidenciales anticipadas en un plazo máximo de 60 días.
El fallo subraya que la crisis política no justificaba las acciones tomadas por Yoon, y que la situación en la Asamblea Nacional en ese momento no ameritaba el ejercicio de poderes nacionales de emergencia. Además, se concluyó que el presidente infringió disposiciones constitucionales al violar el derecho de los legisladores a deliberar y votar, así como su inmunidad parlamentaria.