El Pentágono confirmó el despliegue del destructor USS Gravely en el Golfo de México, como parte de un esfuerzo para fortalecer la seguridad en las aguas territoriales de Estados Unidos. Esta misión también incluye labores antinarcóticos, lo que refuerza la lucha contra el tráfico de drogas en la región.
El USS Gravely, un destructor de la clase Arleigh Burke, zarpó de la Estación Naval de Armas de Yorktown, Virginia, con el objetivo de apoyar al Comando Norte de EE.UU. en su misión de proteger la soberanía del país. La participación de la nave también refuerza la vigilancia en la frontera marítima, clave para el control de las aguas cercanas al país.
Además de su misión de seguridad, el USS Gravely se enfocará en la interdicción de drogas que ingresan por el Golfo de México, según indicó el Teniente General Alexus Grynkewich. La operación busca minimizar el impacto del narcotráfico en la región y aumentar el control sobre las rutas ilícitas.
