Este miércoles 7 de mayo de 2025, el Vaticano dio inicio al cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco, fallecido el pasado 21 de abril. A las 17:46 h local, el maestro de Celebraciones Litúrgicas, Diego Ravelli, pronunció la tradicional fórmula en latín “Extra omnes” (“fuera todos”), ordenando la salida de todas las personas no autorizadas de la Capilla Sixtina. Con ello, los 133 cardenales electores quedaron encerrados para comenzar las deliberaciones.
Dentro de la capilla, los cardenales escucharon una meditación a cargo del predicador capuchino Raniero Cantalamessa antes de iniciar las votaciones. El proceso exige que el nuevo pontífice obtenga al menos 89 votos, equivalentes a dos tercios del total de electores. Las votaciones continuarán hasta alcanzar el consenso necesario.
Durante el cónclave, los cardenales tienen prohibido abandonar el territorio vaticano o comunicarse con el exterior, bajo pena de excomunión. Se espera que las votaciones se realicen en sesiones matutinas y vespertinas, con la tradicional señal de humo blanco o negro para indicar si se ha alcanzado una decisión.