En respuesta a la reciente escalada arancelaria implementada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, China anunció la reducción inmediata en la importación de películas de Hollywood. La Administración Nacional de Cine de China (NFA, por sus siglas en inglés) indicó que esta medida se alinea con las preferencias del mercado y las elecciones del público, señalando que la demanda de cine estadounidense en el país ha disminuido en los últimos años.
Chris Fenton, autor de “Feeding the Dragon: Inside the Trillion Dollar Dilemma Facing Hollywood, the NBA, and American Business”, comentó que esta acción es una forma notoria de represalia por parte de China con mínimas desventajas para el país asiático. Actualmente, las películas de Hollywood representan solo el 5% de la taquilla total en China, y los estudios estadounidenses reciben únicamente el 25% de esos ingresos, mientras que en otros mercados obtienen el doble.
Esta decisión se enmarca en un contexto de crecientes tensiones comerciales entre ambas naciones, donde China también ha impuesto aranceles adicionales a productos estadounidenses, incluyendo petróleo crudo y maquinaria agrícola, y ha iniciado investigaciones antimonopolio contra empresas como Google.