Investigadores de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés) recuperaron este jueves la grabadora de voz de la cabina y la grabadora de datos de vuelo del avión que se accidentó la noche del miércoles en Washington D.C., según medios locales.
Ambos dispositivos fueron trasladados a los laboratorios de la NTSB para su análisis. El portavoz del organismo, Peter Knudson, informó a USA Today que no hay más grabadoras en la aeronave y que los investigadores continúan buscando la del helicóptero involucrado en el siniestro.
El helicóptero militar Black Hawk, que llevaba a tres tripulantes, realizaba un vuelo de entrenamiento. Según el secretario de Defensa, Pete Hegseth, la tripulación era “bastante experimentada”.
Los investigadores federales de aviación aseguraron que trabajarán para esclarecer las causas de la colisión, que ocurrió el miércoles a las 20:48 horas cuando el helicóptero y el avión impactaron mientras la aeronave, con 64 personas a bordo, se preparaba para aterrizar en el aeropuerto de Washington.
Este jueves, las autoridades confirmaron que no hubo sobrevivientes en el accidente.
