El saldo de víctimas mortales por los incendios en el sur de California ascendió a 16, según el reporte más reciente del médico forense del Condado de Los Ángeles. De las víctimas, 11 corresponden al incendio Eaton, que afecta áreas cercanas a Pasadena y Altadena, mientras que cinco se atribuyen al incendio Palisades, el más grande y devastador hasta ahora, con solo un 11% de contención.
Desde el inicio de los incendios el pasado martes, las llamas han arrasado aproximadamente 15 mil hectáreas y destruido unas 12 mil estructuras, incluidas viviendas y automóviles. Las cuadrillas de bomberos continúan combatiendo los focos activos en medio de condiciones adversas, con la previsión de vientos más intensos que dificultarán los esfuerzos de contención.
El incendio Palisades, responsable de consumir cerca de 9 mil hectáreas, avanza rápidamente hacia el este, amenazando barrios residenciales como Brentwood y Encino. Jesús Ruiz, portavoz del condado, advirtió sobre el “avance significativo” del fuego hacia zonas densamente pobladas, mientras que el alguacil Robert Luna confirmó el uso de perros especializados en la búsqueda de víctimas.
En contraste, los bomberos han logrado controlar por completo el incendio Lidia y han avanzado en la contención de otros focos: Kenneth (80%), Hurst (76%) y Eaton (15%). Sin embargo, la situación sigue siendo crítica en Palisades, que continúa siendo el mayor desafío para las autoridades locales.
