El gobierno de Estados Unidos, bajo la administración del presidente Donald Trump, está evaluando la posibilidad de llevar a cabo ataques con drones contra cárteles de la droga en México, según informaron seis funcionarios y exfuncionarios estadounidenses a NBC News. Estas discusiones incluyen la opción de realizar operaciones encubiertas sin el consentimiento del gobierno mexicano.
En respuesta, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su firme oposición a cualquier acción militar unilateral en territorio mexicano, enfatizando que tales medidas no resolverían el problema del narcotráfico. Sheinbaum subrayó la importancia de abordar las causas subyacentes y fortalecer la cooperación en inteligencia y coordinación entre ambos países.
Estas deliberaciones se producen en un contexto de creciente presión por parte de Estados Unidos para combatir el tráfico de drogas y la violencia relacionada con los cárteles. Sin embargo, cualquier intervención militar directa en México podría generar tensiones diplomáticas y suscitar preocupaciones sobre la soberanía nacional.