El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reaccionó a la reciente caída de los mercados financieros instando a la población a mantener la calma y la determinación. A través de sus redes sociales, Trump enfatizó que el país tiene la oportunidad de corregir acciones que debieron haberse tomado hace décadas, exhortando a no ser “débiles” ni “estúpidos”, y a ser “fuertes, valientes y pacientes” para alcanzar la grandeza.
Esta declaración se produce en un contexto de volatilidad en los mercados bursátiles, atribuida en parte a las políticas arancelarias implementadas por su administración. Estas medidas han generado preocupación entre inversores y analistas sobre una posible recesión económica.
Mientras tanto, funcionarios de la Casa Blanca han atribuido la volatilidad a factores emocionales en el mercado, refiriéndose a los “espíritus animales” que influyen en el comportamiento de consumidores e inversores. Este término, acuñado por el economista John Maynard Keynes, describe cómo las emociones humanas pueden impactar en las decisiones económicas.
