Un impactante incidente ha conmocionado a la ciudad de París luego de que una turista arrojara a un recién nacido por la ventana de un hotel en el centro de la capital francesa. El suceso, ocurrido en las primeras horas de la mañana, ha dejado a residentes y autoridades en estado de shock, mientras se investigan las circunstancias que llevaron a este trágico acto.
Según testigos presenciales, la mujer, cuya identidad no ha sido revelada, lanzó al bebé desde el cuarto piso del hotel antes de intentar quitarse la vida. Rápidamente, los servicios de emergencia acudieron al lugar para atender tanto al recién nacido como a la madre, quienes fueron trasladados de urgencia a un hospital cercano. Las condiciones de ambos permanecen críticas.
Las autoridades francesas han iniciado una investigación para determinar los motivos detrás de este acto, que ha generado una ola de indignación y tristeza en la comunidad local. “Es un hecho desgarrador que nos deja sin palabras. Estamos trabajando para entender qué pudo llevar a alguien a cometer un acto tan extremo”, declaró un portavoz de la policía parisina.
Este trágico suceso ha reabierto el debate sobre la salud mental y el apoyo a las madres en situaciones de vulnerabilidad, especialmente en contextos de viajes o aislamiento. Organizaciones sociales han llamado a reforzar los sistemas de ayuda psicológica y emocional para prevenir hechos similares en el futuro, mientras la comunidad espera noticias sobre la recuperación del bebé y su madre.